Las nuevas sanciones de EE.UU. contra más de 200 empresas y 180 buques del sector energético ruso han generado un impacto inmediato en Europa. Hungría advirtió que estas medidas provocarán un aumento alarmante en los precios del combustible, afectando la economía regional. El ministro húngaro, Peter Szijjarto, criticó las sanciones y anunció consultas urgentes con socios europeos para mitigar el impacto. Además, el cese del tránsito de gas ruso a través de Ucrania ha exacerbado la crisis, elevando los precios del gas natural. La situación amenaza con afectar a consumidores y empresas, mientras Hungría busca proteger a la región de las consecuencias económicas.